jueves, 30 de abril de 2009

OBSERVATORIO DE ABRIL

Llegamos al mes de los cambios de paisaje. Los campos verdean ya con mayor intensidad, con muchas ganas de vivir y el ambiente se vuelve más agradable. Varios aviones comunes recién llegados revolotean por los aleros del ayuntamiento de Grajera en busca de una nueva oportunidad para construir allí sus nidos. Los asfodelos o gamones, empujan con fuerza sus hojas cubriendo los eriales por encima de La Dehesilla, donde despiertan también las nuevas violetas. En el cielo la primera aguililla calzada de la temporada levanta su vuelo por el pinar; en el suelo son las hormigas las que hacen sus cráteres sacando del agujero uno a uno cada grano de arena del tapado hormiguero.



Estamos en abril y detectamos el primer canto de cuco, aves llegadas de África y que buscarán los nidos de otras aves para parasitarlas. Cantan verderones comunes, petirrojos, verdecillos, pardillos, pinzones vulgares y zorzales charlos. Se ven las primeras collalbas grises y mosquiteros papialbos y también van pasando las lavanderas boyeras. En las primeros días los rosales silvestres ya van echando sus hojillas, pero el majuelo o espino albar tendrá que esperar hasta mediados de mes para asomar las suyas. En el soto ya cantan bisbitas arbóreos, chochines y escribanos soteños. Pero también podemos escuchar a los ruiseñores comunes, cuyos cantos potentes y penetrantes se captan a mucha distancia. Un colirrojo real pasajero nos saluda en la arboleda. Tiempo de paso.

La charca de las cigüeñas, situada en un ramal de la cañada real soriana, está llena de agua y en sus aguas tranquilas crecen los ranunculos y enseñan sus blancas flores. Durante todo el mes los chopos del soto van echando tímidamente sus hojas. Les cuesta mucho. La meseta es muy dura y cualquier noche viene con heladas. Pero también lluvias. Y hasta un día nos levantamos de nuevo con nieve en los campos y en las montañas.
Es tiempo de cambios.

jueves, 23 de abril de 2009

OBSERVAR


Salimos al campo y nos ponemos a observar, pero ¿qué es observar?. La observación no es ver ni mirar, es mucho más. Implica percibir con todos los sentidos la realidad que tenemos delante. Es estar atento a todo lo que nos rodea: escuchar el suave viento que viene de poniente, sentir el frescor de la mañana en la cara, ver cómo van abriendo las hojas nuevas del espino albar o detectar los sigilosos movimientos de un corzo en la lejanía. Observar es como leer ese gran libro que es la Naturaleza y muchas veces necesitamos que alguien nos enseñe a adentrarnos en este fascinante mundo.


Desde Grajera Natural queremos animaros a caminar por los campos y montes de su comarca, y que aprendáis a reconocer con nuestra ayuda los diferentes árboles y arbustos, aves y mamíferos, huellas en el suelo y estrellas en el cielo. Y que al mirar al horizonte podamos en definitiva interpretar el paisaje. De esta manera descubriremos cómo se adaptan los seres vivos a su medio y los factores que condicionan su supervivencia, acercando lo científico a lo coloquial a la vez que aprenderemos a sentirnos parte del engranaje de la vida.

También os guiaremos en vuestras visitas a los Parques Naturales de las Hoces del Duratón y de las Hoces del Riaza para sacar de ellas el máximo provecho.

Deseamos que disfrutéis con cada paseo por este blog y, si venís a Grajera, a compartir caminos y cañadas.

OBSERVAR PARA CONOCER. APRENDER PARA DISFRUTAR. COMPRENDER PARA CONSERVAR.

jueves, 16 de abril de 2009

PUNTO NEGRO ELIMINADO

Estamos de enhorabuena. Por fín la torreta del transformador del motor de bombeo de agua de Grajera ya no supone un peligro importante para las aves, especialmente las rapaces. Los apoyos, como ya comentamos en otra entrada, eran de tipo vertical y las aves se electrocutaban al posarse en las torretas. Hasta cuatro ratoneros (Buteo buteo) hemos encontrado muertos a los pies de la torreta en año y medio. Después de dar a conocer el problema al Seprona, Agentes de Medio Ambiente, ayuntamiento y Sociedad Española de Ornitología, no se había llegado a corregir el problema.
El pasado 23 de marzo, en mi recorrido matinal por el soto del arroyo Seco, observé que había un generador bajo la torreta. El día anterior la presión del agua en el pueblo había bajado. Al poco tiempo se acercó al lugar Pedro Heras Gil, de Riaza, quien realiza trabajos de mantenimiento eléctrico, y me indicó que el tranformador se había estropeado. Le comenté la problemática para las aves que suponía la situación de los apoyos verticales y si podía corregirlos.
Cuando volví a pasar por la zona, el 3 de abril, me llevé una gran alegría al comprobar que al sustituir el tranformador, han aprovechado para modificar su situación en la torreta y conectar los cables hacia abajo, eliminando de esta forma el riesgo de electrocución.
Agradecemos desde aquí a Pedro Heras Gil su colaboración y comprensión.











ANTES Y DESPUÉS